Los salones parroquiales se encuentran en la parte inferior de un edificio en piedra de dos plantas, con cubierta de teja a cuatro aguas, que forman destacados aleros. La parte superior la ocupa la casa parroquial.
Posee un patio ajardinado. Huecos adintelados, destacando el de la entrada principal y la hornacina existente entre los dos huecos del primer piso. Posee un buen cerramiento del patio delantero también en piedra.
La reconstrucción fue proyectada por el arquitecto municipal, D. Luis Rodríguez Quevedo en 1949.
En la parte inferior del edificio hay un gran salón (que puede dividirse en tres piezas), una sala para catequesis, una pequeña cocina, un aseo y el despacho parroquial.
Ubicación de la Casa parroquial y despachos: Calle Curato, 2